Cuando se habla de la figura de Frank Sinatra muchos no conocen uno de los aspectos más relevantes de este ser único e irrepetible, su gran altruismo y generosidad.
Desde sus primeros días en la fama, Sinatra ayudó a muchas personas de manera discreta. Apoyó causas benéficas, donó grandes sumas de dinero a hospitales y organizaciones como la Cruz Roja y trabajó con niños enfermos y desfavorecidos. También fue un firme defensor de los derechos civiles, utilizando su influencia para combatir la discriminación racial en el entretenimiento.
Uno de sus gestos más conocidos fue su trabajo con la Fundación de Investigación de Distrofia Muscular, donde ayudó a recaudar millones de dólares. Además, ayudó a amigos y colegas en dificultades económicas sin buscar reconocimiento público.
Frank Sinatra fue un hombre generoso no solo con amigos y colegas, sino con personas de todo el mundo. Aunque tenía fama de ser duro y directo, en privado era muy solidario y ayudaba a quienes lo necesitaban sin esperar reconocimiento.
Donó grandes sumas a hospitales, orfanatos y organizaciones de veteranos. En varias ocasiones, pagó las cuentas médicas de desconocidos y ayudó a familias en crisis. Durante la Segunda Guerra Mundial, apoyó activamente a los soldados, realizando conciertos y enviando dinero a sus familias.
También usó su influencia para luchar contra la discriminación racial. En los años cuarenta y cincuenta, se negó a presentarse en lugares que no permitían la entrada a artistas afroamericanos y defendió públicamente la igualdad de derechos.
En este aspecto es conocido por su apoyo incondicional a su "hermano" Sammy Davis Jr.
Incluso en su vida diaria, tenía gestos de bondad inesperados. Hay muchas historias de él dejando propinas enormes a trabajadores, regalando dinero a personas sin hogar y ayudando en momentos difíciles a quienes no podían pagar sus cuentas.
Su generosidad era parte de quién era, aunque rara vez hablaba de ello.
Frank Sinatra tuvo un gran corazón cuando se trataba de niños enfermos. Durante su vida, donó millones a hospitales infantiles y organizaciones médicas. Cómo he comentado antes, una de sus mayores contribuciones fue a la Fundación de Investigación de Distrofia Muscular, donde ayudó a recaudar fondos para encontrar tratamientos y mejorar la calidad de vida de los niños con esta enfermedad.
También visitaba hospitales en privado, sin cámaras ni prensa. Se sentaba con los niños, les cantaba y les hacía regalos. En muchos casos, cubría los costos de tratamientos médicos para familias que no podían pagarlos.
En los años setenta y ochenta, apoyó activamente el Hospital St. Jude, fundado por su amigo Danny Thomas. Este hospital trata a niños con cáncer sin cobrarles, y Sinatra ayudó con donaciones y eventos benéficos.
No buscaba reconocimiento por estas acciones, simplemente le importaba hacer una diferencia en la vida de los más vulnerables.
Frank Sinatra tuvo varias esposas a lo largo de su vida, y aunque algunas relaciones terminaron en conflicto, en muchos casos siguió ayudándolas después del divorcio.
Con su primera esposa, Nancy Barbato, mantuvo una relación cordial y se aseguró de que ella y sus hijos estuvieran siempre bien económicamente. Aunque se separaron cuando su carrera despegó, nunca dejó de apoyarla.
Ava Gardner, su segunda esposa, fue uno de sus grandes amores. Incluso después de su divorcio, Sinatra la ayudó financieramente en momentos difíciles. Cuando ella tuvo problemas económicos en sus últimos años, él pagó sus facturas médicas en secreto.
Mia Farrow, su tercera esposa, siempre habló bien de él y dijo que, a pesar de su separación, él siguió preocupándose por ella. Aunque su matrimonio fue breve, Sinatra la apoyó emocionalmente durante momentos difíciles de su vida.
Con su última esposa, Barbara Marx, estuvo hasta su muerte. Fue muy generoso con ella y su familia, asegurándose de que estuvieran bien después de su fallecimiento.
A pesar de su fama de ser un hombre duro, tenía un lado leal y generoso con quienes formaron parte de su vida.
Carlos Garcés.
8 de marzo de 2025.
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